LA IMAGEN DE LA VIRGEN DE LOS TREINTA Y TRES "MEMORIAL DE LA HISTORIA DEL URUGUAY"

08.11.2023

De la homilía de Juan Pablo II en Florida (8 de mayo de 1988). 

La Imagen de la Virgen de los Treinta y Tres "memorial de la historia de Uruguay". 

Me dirijo a todos los aquí presentes, para compartir la alegría de sentirnos Pueblo de Dios bajo la mirada maternal de María y ante la imagen santa de la Purísima Virgen de los Treinta y Tres. En este domingo memorable, lleno de gozo pascual, yo, Sucesor del Apóstol Pedro en la sede de Roma y huésped vuestro, lanzo mi llamamiento a esta tierra uruguaya gritando con las palabras del Salmista: "Cantad al Señor un cántico nuevo". El Señor ha dado a conocer su salvación, anunciando la victoria de Cristo sobre el pecado y la muerte. Esa victoria de Cristo resucitado, vencedor del pecado y de la muerte, brilla en la Purísima Virgen María. 

Con vosotros contemplo esta Imagen de María Inmaculada, que es vuestra Patrona, y veo en Ella la victoria de nuestro Dios. María es para vosotros "el signo inmutable e inviolable de la elección por parte de Dios". De esta forma, también en nosotros se cumplen las palabras proféticas que brotaron de sus labios: "Desde ahora todas las generaciones me llamarán bienaventurada". Sí, esta Imagen nos pone en ininterrumpida conexión con las generaciones de vuestro pueblo que se han dejado guiar por su ejemplo. 

Esta Imagen de la Virgen es una llamada y a la vez un signo de la presencia de la Madre de Dios desde los orígenes de vuestra nación. Su talla en madera de vuestros montes es fruto de esta tierra uruguaya. Manos indias la labraron y trajeron por estos parajes. Amor de indios, blancos y mestizos, le hicieron una pequeña hornacina y le ofrecieron sus tierras. Ahora es ya como un memorial de la historia de cada uno de vosotros, de cada familia, de todo el Uruguay. 

Esta Imagen nos trae a la memoria la devoción a la Madre de Dios, así como su fidelidad al Evangelio y a la Iglesia. Recordamos a vuestro prócer nacional, José Artigas, que .puso bajo la protección de María a las poblaciones de Carmelo y de Purificación, y que en los últimos años de su vida os dejó el testimonio humilde del rezo del santo rosario. 

Vosotros bien sabéis que la historia de vuestra Patria está ligada a esta santa Imagen. Con su mismo nombre "la Virgen de los Treinta y Tres" el pueblo ha querido recordar a los héroes que se pusieron bajo su amparo. Por esto, con toda razón, los uruguayos la ensalzan como "Estrella del alba" y la proclaman "Capitana y Guía" por las sendas de la paz y del amor. 

A todos los que moráis en estas benditas tierras os invito a hacer de vuestras vidas un testimonio de la victoria de Cristo Redentor que, desde la Cruz, nos entregó a su Santísima Madre para que fuera también Madre nuestra. Amén.