EL OBISPO: "SEGUIR A CRISTO NO ES CUESTIÓN DE A RATOS SINO NO ANTEPONER NADA AL AMOR DE DIOS"

Inicio del Mes de la Palabra de Dios en la Catedral de Florida.
La 23° semana del tiempo ordinario empezó a correr este Domingo. Mons. Martín celebró en la Catedral a las 19 horas y compartió sus reflexiones sobre las lecturas del día: Sabidurίa 9, 13-19; Filemón 9-10. 12-17; Lucas 14, 25-33.
Al inicio preguntó si Dios es el mayor bien que haya encontrado en mi vida, porque si es así entonces vienen consecuencias. ¿Cuáles son las exigencias del seguimiento? La primera es la RADICALIDAD y por eso las RENUNCIAS. Renunciar a la familia, a los bienes y a sí mismo no significa DESPRECIAR. Por el contrario, se trata de no anteponer nada al amor de Dios, es decir, reordenar nuestros amores.
La segunda es LA CRUZ, un esfuerzo de amor para hacer la voluntad de Dios. Los bienes son un medio, que no se transformen en un fin en sí mismos. Jesús quiere seguidores libres, y por eso es conveniente preguntarnos qué me falta aún renunciar, qué me está pidiendo el Señor que deje a un costado para serle fiel.
La tercera condición del seguimiento es que NO PUEDO SEGUIR A JESÚS DE CUALQUIER MANERA. Es una elección para reflejar su vida en mi vida en el lugar donde me encuentre, por eso no es seguimiento de a ratos y vuelvo a lo de antes. Se trata de permanecer en el tiempo,
La vida del cristiano se enferma, no llegamos a reflejar la luz de Cristo, la apagamos si nuestro seguimiento es pusilánime, entonces la vida de fe enferma, no terminamos la torre, no damos la batalla.
Para concluir el Obispo dijo que los presentes eligieron ir a la Misa y renunciaron a las mil cosas que tendrían para hacer en esa hora del Domingo. Por eso, invitó a la asamblea a pedir un seguimiento verdadero, no sólo de palabra y que seamos luz donde estemos.