MONS. MILTON: "EL SÍNODO ES PARA COMPARTIR, APRENDER Y VOLVER ENRIQUECIDOS A URUGUAY"

Mons. Milton Tróccoli, Obispo de Maldonado está participando del Sínodo de la Sinodalidad en Roma. Desde allí nos envió este mensaje en que nos narra su experiencia:

Hola, un saludo para todos. Aquí en Roma ya está anocheciendo y queremos mandarles un saludo de los uruguayos que estamos aquí participando de este Sínodo de la Iglesia, una instancia muy linda.

Hemos podido saludar al Papa Francisco, darle los saludos de Uruguay y pedirle también que venga, bueno, estamos esperando la respuesta, pero se mostró contento. Contándole también que todos los uruguayos estamos rezando mucho por él. Y a la vez, trabajando, intensamente, aquí en las sesiones del Sínodo que duran prácticamente todo el día, desde las nueve menos cuarto de la mañana hasta las siete de la tarde, donde vamos compartiendo. En cada tema vamos dividiéndonos en distintos grupos y es muy lindo compartir con gente de todo el mundo.

Aquí he tenido oportunidad de trabajar y escuchar por ejemplo a los Obispos de Ucrania, con todo el sufrimiento, el dolor de la guerra. También a los de Medio Oriente, ver situaciones de iglesias muy vivas, muy pujantes, con mucha gente, como sucede con muchas iglesias en África. Encontrar también a muchos hermanos Obispos y también sacerdotes, religiosas, laicos de América Latina, con todas las búsquedas de cada país, de cada iglesia. Así que está siendo una instancia muy linda, de compartir, de aprender mucho de todos para poder volvernos enriquecidos.

Este Sínodo tiene dos etapas. Una es ahora y otra es en octubre del año que viene y entre medio de los dos seguiremos, sin duda, trabajando. Pero esta instancia creo que nos ayuda para escucharnos, para conocernos más, para conocer la realidad de toda la Iglesia universal, con tantas cosas lindas que se están realizando pastoralmente, con tantas búsquedas también, con tantas cosas que hay que discernir, que hay que ir buscando juntos. Creo que nos volveremos con el corazón ensanchado y también con una visión de toda la Iglesia universal, que eso es muy lindo, el sentir que en distintas partes del mundo compartimos la misma fe y sobre todo, cada día, cuando celebramos juntos la Eucaristía, nos encontramos todos allí, en Jesús, que nos reúne, que nos convoca y que nos sigue hablando al corazón.

Así que les agradezco mucho las oraciones, se sienten mucho. Les agradezco también a todos el cariño y bueno, sigan rezando por esta instancia sinodal, para que pueda ser fecunda, para que dé buenos frutos y también para que nosotros al volver a Uruguay podamos compartir y contagiar todo el entusiasmo, toda la esperanza y todas las cosas lindas que aquí estamos compartiendo y viviendo.

Un abrazo muy grande y muchas bendiciones para todos.