DOMINGO DE RAMOS: ENTREGA DE JESÚS Y COMPROMISO DE SEGUIMIENTO

Mons. Martín bendijo los ramos en la Plaza Asamblea y luego caminamos hasta la Catedral para celebrar el Domingo de Ramos en la Pasión de Nuestro Señor. En una mañana cálida y luminosa, cientos de cristianos inauguraron la Semana Santa con fervor y alegría.

En la homilía el Obispo se refirió a qué hacemos con los ramos benditos de este día. "Por lo general los ponemos detrás de un cuadro. Y si alguien nos pregunta qué significan ahí, por qué tenemos ese ramito de olivo en nuestra casa, por lo general respondemos que es "para protección" y es cierto, porque Dios siempre nos cuida y protege. Pero falta algo para que la respuesta sea completa. Podemos aprovechar esa pregunta para anunciar el Evangelio, para decir que es un signo de este Domingo que nos recuerda la entrega de Jesús y nos mueve a un compromiso personal de seguirlo para colaborar en la extensión del Reino de Dios."

Mons. Martín recordó que "el camino del cristiano es entrega en medio de sufrimientos pero con esperanza, la meta está muy clara."

De los personajes que intervienen en la lectura de la Pasión, eligió a Pedro, que negó a Jesús y al darse cuenta "lloró amargamente" y Pilatos, que niega a Jesús, deja de la lado la verdad por conveniencia, "no fuera que si no hacía lo que le pedían tuviera después problemas".

"La Pasión es el reflejo de nuestras vidas, con la entrega y con la negación. Que esta celebración nos mueva a que, en la medida de nuestras posibilidades, nos comprometamos a acompañar a los que sufren y a luchar contra la violencia y la injusticia."

"La muerte es el camino hacia la paz definitiva y ya no tiene el poder de derrotarnos. Sabemos que por la muerte y resurrección Cristo nos abrió el cielo y la eternidad en que estaremos junto a nuestros seres queridos."

"Semana Santa es un tiempo para vivir con corazón agradecido y comprometidos en el amor. Pidamos bendiciones para nosotros, para la Iglesia y para aquellos cristianos que se han alejado de la Iglesia."