POR AMOR A MARÍA

14.11.2022

Esta vez el pronóstico no falló, la lluvia tan anhelada no se hizo esperar... pero los peregrinos tampoco.

A pesar de las inclemencias del tiempo, en el día de ayer una multitud de personas se acercaron a demostrarle su amor y devoción a la Virgen de los Treinta y Tres.  La fe y el amor a la Madre movilizó a estos peregrinos que desde todos los rincones del país viajaron bajo lluvia para llegar a su encuentro. 

Trayendo sus intenciones y la de tantos que se confiaron a sus oraciones, transmitían su alegría, su devoción y el amor a la Virgen en cada gesto compartido. 

La tarde fue otra fiesta... Entre música, baile y compartir, los peregrinos animaron la tarde. Culminando la jornada con el rezo del Santo Rosario en la Catedral. Y así, de la mano de María, Virgen de los Treinta y Tres, ir emprendiendo el regreso a sus hogares.

La lluvia que para muchos podría haber sido un impedimento para peregrinar, es motivo de bendición de Dios por intercesión de la Virgen que, desde que nació la Patria, protege y atiende las necesidades de su pueblo.

¡Virgen de los Treinta y Tres, ruega por nosotros!