PASCUA 23

Antes de rezar el Regina Caeli en este tercer domingo de Pascua, el Papa reflexionó sobre el Evangelio del día, destacando la necesidad de dedicar cada noche un tiempo para realizar un examen de conciencia, pasando por el corazón la historia de nuestra vida, de un cierto período, de nuestras jornadas, con las desilusiones y las esperanzas.

Miles de fieles han subido el Cerro del Verdún desde el fin de semana y especialmente ayer, en la Fiesta de la Virgen María Inmaculada. Acompañamos este camino con nuestra oración, especialmente por los enfermos:

Celebramos el Domingo de la Misericordia en la Catedral de Florida, con actividades organizadas por la Familia de María. Personas de diferentes comunidades, consagradas y sacerdotes, y hasta religiosas de Burundi, participaron con fervor y alegría de la Eucaristía. Transcribimos la Homilía de Mons. Martín.

El Papa Francisco en su alocución previa al Regina Coeli, recuerda el Evangelio de Hoy, domingo de la Divina Misericordia, que narra dos apariciones de Jesús resucitado a los discípulos y en particular a Tomás, el "apóstol incrédulo". Tomás pide una señal extraordinaria y Jesús le muestra sus llagas, yendo delante de todos, en la comunidad.

Oremos a Cristo, pan de vida, que en el último día resucitará a los que se alimentan con su palabra y con su cuerpo, y digámosle: